Agentes de diez cuarteles dispersaron problemas en Washington Heights.NUEVA YORK.- Policías de 10 cuarteles de distintas zonas de la ciudad tuvieron que ser enviados al Alto Manhattan portando largas macanas, cascos protectores y bombas de gas, así como otras herramientas anti motines para sofocar un intento de disturbios escenificado en la avenida Saint Nicholas entre las calles 189 y 190 después del desfile dominicano en la Sexta Avenida.
Cientos de criollos se replegaron en vehículos y a pie a Washington Heights, el barrio dominicano con mayor población quisqueyana en el mundo para seguir disfrutando de la adelantada celebración de la Restauración Nacional efemérides a la que cada año se dedica la parada.
Haciendo sonar estridentemente las bocinas de sus vehículos, con música a todo volumen y bebiendo alcohol y cervezas, los dominicanos coparon unos 10 bloques de la referida avenida, pero al parecer entre los que celebraban, aparecieron como siempre algunos "cabezas calientes" que comenzaron a crear problemas en las calles.
Un grupo volteó un vehículo a la altura de la calle 189 y minutos después parecieron varias unidades patrullas de la policía, pero ante el gentío que se iba congregando minuto a minuto, los primeros oficiales en llegar tuvieron que llamar al comando central y explicar que ellos no podían solos con la situación.
Fue entonces cuando el alto mando policial decidió y tomando en cuenta importantes precedentes en la comunidad como los disturbios de tres días por la muerte de Kilo García en la década de los noventas, reforzar la vigilancia.
Aunque unos 20 dominicanos fueron arrestados por delitos menores, muchos residentes alabaron el comportamiento de la policía y lo calificaron de tolerante.
En la calle 207 se reportó un choque múltiple, cuando un joven que conducía un vehículo todo terreno impactó otro carro y este a su vez a un taxi. El taxista resultó herido y tuvo que ser ingresado en el hospital Presbiteriano.
Las autoridades no especificaron el tipo de heridas, ni la condición del conductor del taxi.
Grupos de hasta cinco policías juntos fueron vistos por este reportero patrullando en las inmediaciones de la calle 174 y avenida Audubon a la 1:24 de la madrugada.
Los agentes pusieron docenas de multas por conducta desordenada, violar las reglas de la calidad de vida, tirar basura en las calles, beber alcohol o cerveza en la vía pública y resistencia al arresto.
La policía recorrió amplios sectores y donde quiera que veía varias personas juntas las dispersaba y ordenaba a los integrantes marcharse hacia sus casas o no formar grupos en las calles y aceras.
Cientos de criollos se replegaron en vehículos y a pie a Washington Heights, el barrio dominicano con mayor población quisqueyana en el mundo para seguir disfrutando de la adelantada celebración de la Restauración Nacional efemérides a la que cada año se dedica la parada.
Haciendo sonar estridentemente las bocinas de sus vehículos, con música a todo volumen y bebiendo alcohol y cervezas, los dominicanos coparon unos 10 bloques de la referida avenida, pero al parecer entre los que celebraban, aparecieron como siempre algunos "cabezas calientes" que comenzaron a crear problemas en las calles.
Un grupo volteó un vehículo a la altura de la calle 189 y minutos después parecieron varias unidades patrullas de la policía, pero ante el gentío que se iba congregando minuto a minuto, los primeros oficiales en llegar tuvieron que llamar al comando central y explicar que ellos no podían solos con la situación.
Fue entonces cuando el alto mando policial decidió y tomando en cuenta importantes precedentes en la comunidad como los disturbios de tres días por la muerte de Kilo García en la década de los noventas, reforzar la vigilancia.
Aunque unos 20 dominicanos fueron arrestados por delitos menores, muchos residentes alabaron el comportamiento de la policía y lo calificaron de tolerante.
En la calle 207 se reportó un choque múltiple, cuando un joven que conducía un vehículo todo terreno impactó otro carro y este a su vez a un taxi. El taxista resultó herido y tuvo que ser ingresado en el hospital Presbiteriano.
Las autoridades no especificaron el tipo de heridas, ni la condición del conductor del taxi.
Grupos de hasta cinco policías juntos fueron vistos por este reportero patrullando en las inmediaciones de la calle 174 y avenida Audubon a la 1:24 de la madrugada.
Los agentes pusieron docenas de multas por conducta desordenada, violar las reglas de la calidad de vida, tirar basura en las calles, beber alcohol o cerveza en la vía pública y resistencia al arresto.
La policía recorrió amplios sectores y donde quiera que veía varias personas juntas las dispersaba y ordenaba a los integrantes marcharse hacia sus casas o no formar grupos en las calles y aceras.
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