Gloria Medina/edlpNueva York — Con la solemnidad del Viernes Santo, cientos de feligreses se unieron ayer una vez más a procesiones de silencio en la ciudad de Nueva York conmemorando la pasión, crucifixión y muerte de Jesucristo.
“Es muy buena, la procesión ayuda a mantener la fe de los cristianos”, dijo María Wallewski, originaria de Perú, que participó por primera vez en la procesión de silencio que comenzó en la Catedral de San James en Brooklyn y pasó por el puente de Brooklyn hasta llegar a la Zona Cero en el Bajo Manhattan.
Mientras uno de los feligreses cargaba una cruz de madera durante el peregrinaje, se hicieron las lecturas correspondientes de las 14 estaciones del Vía Crucis.
“El participar en la procesión es una oportunidad para apreciar más el gran sacrificio que hizo Nuestro Señor para estar con nosotros”, exclamó Brígida Barrera, una analista financiera, de 45 años. “Para mí es la oportunidad de evangelizar y fortalecer mi fe y de otras personas”, agregó.
“Esta procesión la hemos realizado desde hace 14 años y cada año se une más gente”, dijo Mary Szymkoviak, vocera del evento organizado por el grupo Comunión y Liberación.
En varias iglesias de la Gran Manzana se realizaron representaciones del Vía Crucis con la idea de llegar a los cristianos, especialmente a los niños, según Evelyn González feligrés de la parroquia Holy Cross en El Bronx.
“Es muy buena, la procesión ayuda a mantener la fe de los cristianos”, dijo María Wallewski, originaria de Perú, que participó por primera vez en la procesión de silencio que comenzó en la Catedral de San James en Brooklyn y pasó por el puente de Brooklyn hasta llegar a la Zona Cero en el Bajo Manhattan.
Mientras uno de los feligreses cargaba una cruz de madera durante el peregrinaje, se hicieron las lecturas correspondientes de las 14 estaciones del Vía Crucis.
“El participar en la procesión es una oportunidad para apreciar más el gran sacrificio que hizo Nuestro Señor para estar con nosotros”, exclamó Brígida Barrera, una analista financiera, de 45 años. “Para mí es la oportunidad de evangelizar y fortalecer mi fe y de otras personas”, agregó.
“Esta procesión la hemos realizado desde hace 14 años y cada año se une más gente”, dijo Mary Szymkoviak, vocera del evento organizado por el grupo Comunión y Liberación.
En varias iglesias de la Gran Manzana se realizaron representaciones del Vía Crucis con la idea de llegar a los cristianos, especialmente a los niños, según Evelyn González feligrés de la parroquia Holy Cross en El Bronx.
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